Hero Image

Desinformación exportada: De cómo grupos extranjeros trafican influencias en Kenia mediante Twitter

Odanga Madung

Escrito por Odanga Madung y Contributors

Descargar PDF 1,3 MB

Síntesis

Durante estos últimos años, en todo el mundo hemos sido testigos de cómo las plataformas de las redes sociales no cumplen sus promesas idílicas y se convierten en herramientas poderosas de agentes maliciosos.

Esto es particularmente evidente en el mundo no occidental, donde las plataformas carecen del contexto cultural, el personal y la voluntad para enfrentar los problemas de información errónea, desinformación y discurso de odio. Este fenómeno lo analizó la Fundación Mozilla en septiembre y noviembre de 2021.

Esta nueva investigación demuestra en qué grado los agentes maliciosos lejanos (a veces en otro continente) pueden utilizar como arma plataformas como Twitter para manipular el discurso público de un país.

Reportaje adicional de Shandukani O. Mulaudzi

Screen Shot 2022-02-18 at 1.21.20 PM


Resumen ejecutivo

En 2020 y 2021, los kenianos discutieron y debatieron en línea dos leyes federales: la Ley de Salud Reproductiva de 2020 y la Ley de Gestación por Sustitución de 2021. Esta legislación buscaba declarar ilícitas las esterilizaciones forzadas; volver gratuitos los servicios prenatales, de parto y postnatales para todas las mujeres del país, además de formular las normas, regulaciones y lineamientos sobre reproducción asistida. (La primera ley fue presentada; la segunda, sigue siendo objeto de debate.)

Se trata de conversaciones importantes y llenas de matices que se desarrollan con frecuencia en Twitter. Pero la evidencia que recopiló el investigador y experto de Mozilla, Odanga Madung, sugiere que CitizenGo, la organización política de derechas con sede en España, situada a miles de kilómetros, tuvo mucho que ver en encauzar estas conversaciones en Twitter al insertar información errónea y lenguaje incendiario. Y parece que la propia característica de Tendencias deTwitter actuó como cómplice involuntario, al amplificar por lo menos diez etiquetas relacionadas.

Mediante estas campañas en Twitter, se atacó a los políticos y activistas kenianos que abogaban por las leyes en particular y los derechos reproductivos en general. Asimismo, se hicieron afirmaciones falsas y engañosas acerca del aborto, gestación subrogada y otras cuestiones relacionadas con la salud reproductiva. Por ejemplo, se afirmó que era más probable que los niños nacidos de madres subrogadas manifestaran problemas conductuales y emocionales, un señalamiento que el Centro Africano de Investigación sobre Población y Salud (APHRC) ha calificado como "carente de todo sustento científico".

La investigación de Madung muestra que estas campañas en Twitter exhibieron varias características clave de comportamiento no auténtico coordinado. Madung empleó la interfaz de programación de aplicaciones Firehose de Twitter para mostrar que miles de los tuits problemáticos que repetían etiquetas, frases y memes idénticos, provenían de cuentas que no tuiteaban otra cosa que etiquetas y estaban cuidadosamente sincronizados para ciertas horas del día.

Además, los participantes en la "industria de la desinformación" keniana corroboraron la implicación de CitizenGO. En una investigación previa, Madung sondeó la industria de la desinformación en Kenia, una red de usuarios de Twitter en el país que reciben efectivo e instrucciones para convertir en tendencia ciertos temas y opiniones. Más recientemente, dichas fuentes señalaron que recibieron dinero, contenido e instrucciones de CitizenGO por Whatsapp.

De hecho, después de presentarle esta investigación a Twitter en febrero de 2022, la plataforma suspendió permanentemente más de 240 cuentas asociadas a las campañas por considerar que contravenían sus Términos de Servicio.

Aunque estas campañas en Twitter en particular no habían sido denunciadas anteriormente, el fenómeno en general no es nuevo. Kenia no es el único lugar que ha sido manipulada por entidades externas mediante el algoritmo de tendencias de Twitter. En Sudáfrica, la empresa de relaciones públicas británica Bell Pottinger dirigió una campaña encubierta para sembrar tensiones raciales.

CitizenGO fue contactado varias veces antes de publicar este informe, pero no ofreció respuesta.


La presente investigación muestra que Twitter no ha invertido recursos suficientes (comprensión del contexto cultural, personal adecuado ni priorización interna, entre otros) para atajar las maneras como agentes maliciosos pueden utilizar la plataforma como arma y abordar cómo esta situación se está volviendo más y más incierta conforme se acercan las elecciones federales de 2022 en Kenia.

Odanga Madung, experto de Mozilla

Introducción

En nuestra investigación anterior, analizamos cómo los agentes maliciosos (particularmente los gobiernos) han explotado las características de las plataformas de redes sociales con propósitos infames. Y ya mostramos cómo la falta de atención y la nula respuesta de estas plataformas al posible daño ocasionado por sus funciones han tenido consecuencias muy reales. En toda Kenia, se han utilizado estas plataformas para aplastar la disidencia y consolidar el poder. En esta ocasión, queremos mostrar de qué manera esta negligencia también posibilita que grupos externos manipulen el ecosistema de plataformas. En particular, los movimientos de derechas europeos podrían estar buscando manipular las conversaciones sobre los derechos y la salud reproductiva.

En 2020, se presentó al Parlamento la Ley de Salud Reproductiva y se pidió a los legisladores kenianos que votaran para "proporcionar un marco al derecho a la salud reproductiva y las decisiones al respecto, y establecer las normas de la salud reproductiva". La ley buscaba que las esterilizaciones forzadas fueran ilegales y que los servicios prenatales, de parto y postnatales fueran gratuitos para todas las mujeres en el país. Dejaba en claro que todos tienen derecho a los servicios de salud reproductiva, incluidos los adolescentes. Casi de inmediato, los antiabortistas presentaron objeciones y llamaron a la legislación “ley del aborto”. Además, señalaron que le abría el paso al aborto legalizado y al uso de anticonceptivos en la adolescencia.

En Kenia, el aborto es ilegal si la vida o la salud de la mujer no corren peligro y si no se requiere un tratamiento de emergencia. De acuerdo con un estudio de 2012, el 40% de los embarazos en Kenia no son planificados. Dado que no todas las mujeres tienen acceso a los anticonceptivos, los abortos clandestinos y riesgosos son comunes. Ese mismo año, los investigadores descubrieron que en el país se habían practicado casi medio millón de abortos.

En 2021, la Ley de Gestación por Sustitución se sometió a consideración de los legisladores. Proponía la conformación de una autoridad de Tecnología de Reproducción Asistida para formular las normas, regulaciones y lineamientos de reproducción asistida; la creación y mantenimiento de una base de datos nacional confidencial de receptores o proveedores de servicios, esperma, óvulos y embriones, entre otras funciones. De nuevo, se desató una oposición férrea. En esta ocasión, los antiabortistas señalaron que la ley transformaría a Kenia en "un centro para la fabricación de bebés" y que "la práctica de maternidad subrogada equivale a la compraventa de niños". Sin embargo, esta legislación, a diferencia de la Ley de Salud Reproductiva, fue promulgada por el Parlamento y seguramente se debatirá en el Senado de Kenia en febrero de 2022.

Kenia no es el único lugar en el que entidades externas han manipulado el algoritmo de tendencias de Twitter. En Sudáfrica, Bell Pottinger, la ahora deshonrada y extinta agencia de relaciones públicas de Londres, empezó a trabajar para un infame cliente en 2016, lo que precipitó su final. En enero de ese año, la compañía se reunió con Ajay, Atul y Tony Gupta, los propietarios de Oakbay Investments que habían sido acusados de corruptelas durante el gobierno del entonces presidente Jacob Zuma. A la reunion también asistió Duduzane Zuma, hijo del expresidente. De acuerdo con documentos filtrados, Duduzane y los Gupta instruyeron a Bell Pottinger que realizara una campaña dirigida a los sudafricanos “comunes y corrientes”. La idea era desviar la atención de la supuesta apropiación del Estado por parte de la familia Gupta al distraer a la población negra mayormente marginada y suscitar conversaciones sobre el "apartheid económico" en el país desde que se democratizó en 1994.

Se descubrió que la campaña de Bell Pottinger infiltró una mezcla de canales de comunicación, incluido Twitter. La frase más popular que llegó a ser sinónimo de la campaña fue "capital monopolista blanco". Conforme a ciertos informes, más de cien cuentas falsas difundieron más de 220 000 tuits y algunas de las etiquetas más populares fueron #CapitalMonopolistaBlanco y #RespetoALosGupta. Con el ataque coordinado se pretendía unir a los sudafricanos contra un enemigo común que, según los bots, eran los negocios de blancos y no los Gupta, cuya reputación se buscaba limpiar mediante la campaña. Aunque a los Gupta, Bell Pottinger y Jacob Zuma, el tiro les salió por la culata, resulta innegable que la campaña sí logró sembrar tensión racial en el país.

Casos como este muestran que los agentes maliciosos que buscan impulsar una conversación pueden manipular el algoritmo de tendencia muy fácilmente.

En esta investigación, exploramos cómo un grupo de extrema derecha en Europa quizás se apropió de las conversaciones en Kenia sobre los derechos y la salud reproductiva al insertar desinformación y lenguaje incendiario en un diálogo regional importante y lleno de matices. Estas conversaciones no solo llevaron a disensión en Twitter, sino que podrían haber influido en el proceso de decisión parlamentario respecto a las leyes. Esta investigación arroja luz sobre la manera como CitizenGo parece haber conducido sus campañas de desinformación, las consecuencias en Kenia y la incapacidad de Twitter para atender el problema.

Ambos escenarios tienen algo en común. En cada ocasión, la oposición a las leyes se dio en paralelo a campañas en línea iniciadas desde Twitter. Además, en ambos casos se atacó a las mujeres políticas que las promovieron. Por último, en las dos ocasiones, el algoritmo de tendencias de Twitter amplificó las campañas de manera que alcanzaron a millones de kenianos.

Pero, ¿quién estaba detrás de estas campañas en línea? Y, ¿eran reales y auténticas las cuentas que tuiteaban esos mensajes? Nuestra investigación apunta a que CitizenGo, una agrupación con sede en España, parece ser el instigador. Llegamos a esta conclusión analizando los tuits de la cuenta de Twitter de CitizenGO y su personal, junto con entrevistas realizadas a influenciadores que afirmaron haber recibido pagos por participar en las campañas. Nuestra investigación sugiere que tales campañas deberían considerarse actividad no auténtica coordinada y que Twitter terminó amplificando los mensajes de las mismas mediante sus algoritmos de tendencias.

De hecho, cuando le presentamos esta evidencia a Twitter en 2022, la plataforma respondió suspendiendo permanentemente más de 240 cuentas relacionadas con esta actividad, las cuales parecían haber contravenido sus Términos de Servicio. Específicamente, las cuentas violaron las reglas de Twitter relativas a implicación artificial y coordinación para amplificar o disrumpir conversaciones.


¿Quién es CitizenGO?

CitizenGO es una organización española que se presenta como una comunidad de ciudadanos activos que trabajan juntos para defender los movimientos contrarios al derecho a decidir. Su fundador es Ignacio Arsuaga y está estrechamente relacionada con la extrema derecha española mediante sus vínculos con Vox, partido que la BBC ha tachado de antiinmigrante, antigénero y negacionista del cambio climático. También se ha descubierto que CitizenGO dirigió un modelo de campaña política súper PAC en 2019 durante las elecciones nacionales españolas, además de que se ha relacionado a la organización con movimientos de extrema derecha en Italia, Hungría y Alemania. Por si fuera poco, uno miembro de su patronato fue sentenciado a cuatro años de cárcel en enero de 2021 por acusaciones de corrupción, y también se denunció a la organización por presentar información engañosa respecto a como financia sus operaciones.

Existe evidencia en Kenia, Nigeria, Tanzania y otros países africanos de que CitizenGO exporta su modelo de peticiones, campañas y cabildeo fuera de línea, con el fin de negar a las mujeres sus derechos humanos. Esto incluye su derecho a la salud y a la vida de familia. Kenia ha sido un blanco importante para CitizenGo por tratarse de una sociedad conservadora que se identifica como 85% cristiana. Las tácticas de la organización en Kenia reflejan sus acciones en España y el resto de la Unión Europea. De esta manera, Kenia podría servirle a CitizenGo como prueba de fuego para los mensajes, actividades y tácticas en todo el continente africano.

De acuerdo con Peter Tatchell, activista británico proderechos humanos, los movimientos de derecha ven a África como uno de sus bastiones de esperanza. "Los religiosos y la extrema derecha han perdido la lucha contra los derechos de género en Occidente. Ahora se enfocan en los países más pobres, donde pueden utilizar sus millones para comprar influencia, manipular la agenda política y ampliar su base de adeptos". Los propios grupos de derecha admiten que tienen la mira puesta en Kenia a largo plazo “porque es un país con mucha influencia en toda África”.

El rostro del activismo de derechas y conservador en Kenia también ha empezado a cambiar. Los activistas de derechas afirman que quienes mueven los hilos de estos movimientos ya no son los salvadores blancos de antes, sino “se ven como nosotros y hablan como nosotros”. Tal es el caso de la directora de CitizenGo para África, Ann Kioko, quien suele encabezar las actividades de la organización en Kenia y el resto del continente.


Sacar provecho de la industria de la desinformación en Kenia

Con el fin de sembrar su narrativa entre las masas, CitizenGo se valió de Twitter y de otras herramientas. En particular, parece que explotaron la floreciente industria de la desinformación en Kenia. Logramos sostener una prolongada entrevista por teléfono y WhatsApp con tres "influenciadores de la desinformación" kenianos, quienes afirmaron que personas en representación de CitizenGo les pagaron entre USD10 y USD15 por campaña.[1] Según dijeron, en las campañas participaron alrededor de 15 personas con varias cuentas de usuario títeres en Twitter.

Los influenciadores nos compartieron pantallazos de los grupos de Whatsapp que llevaban el nombre y marca CitizenGO, en los cuales se coordinarían. A partir de nuestro análisis del contenido en esos grupos, su función consistía en fungir como centro de mando de la campaña, en el que se compartían instrucciones y paquetes mediáticos con los influenciadores y donde estos informaban si la campaña estaba cumpliendo o no su objetivo.

No pudimos confirmar si había miembros de la propia CitizenGo en estos grupos, pero la cuenta de CitizenGo África participó en 7 de las 11 campañas identificadas. Es más, muchos de los activos mediáticos en estas campañas portaban la marca CitizenGo.

En general, estas campañas de manipulación podrían haber empleado una gran cantidad de cuentas para tuitear lo que parecen ser etiquetas predeterminadas y, con ello, lograron que el algoritmo de tendencias de Twitter amplificara sus mensajes problemáticos. Después de analizar las actividades de las cuentas de CitizenGo y su personal entre 2019 y 2021, detectamos 11 de tales campañas y revisamos un total de 20 811 tuits obtenidos mediante Firehose de Twitter. Twitter promovió diez de esas campañas en su sección Tendencias y los influenciadores con quienes hablamos señalaron que se les pagó por participar en ellas.

Hashtag Link Dates Trending
#celebratingAnnkioko https://twitter.com/search?q=%23celebratingannkioko&src=typeahead_click 04/06/2021 https://archive.twitter-trending.com/kenya/12-09-2021
#Istandwithcitizengo https://twitter.com/hashtag/IstandWithCitizenGO?src=hashtag_click 09/11/2020 http://www.trendinalia.com/twitter-trending-topics/kenya/kenya-200911.html
#Annkiokoat33 https://twitter.com/hashtag/AnnKiokoAt33?src=hashtag_click 05/02/2021 https://archive.twitter-trending.com/kenya/02-05-2021
#stopkihikaabortionbill https://twitter.com/hashtag/stopkihikasabortionbill?src=hashtag_click 06/25/2020 https://archive.twitter-trending.com/kenya/25-06-2020
#Notoabortionincovid19 https://twitter.com/hashtag/NoToAbortionInCovid19?src=hashtag_click 05/09/2020 https://archive.twitter-trending.com/kenya/08-05-2020
#passarisabortionkills https://twitter.com/hashtag/PassarisAbortionKills?src=hashtag_click 03/12/2020 https://archive.twitter-trending.com/kenya/12-03-2020
#stopsurrogacybillKE https://twitter.com/hashtag/stopsurrogacybillke?src=hashtag_click 11/19/2020 https://www.google.com/url?sa=i&url=https%3A%2F%2Fmobile.twitter.com%2Fhashtag%2Fstopsurrogacybillke&psig=AOvVaw08yUsGdwodQVzP22qlEWnj&ust=1642607256730000&source=images&cd=vfe&ved=0CAwQjhxqFwoTCJj66oLTu_UCFQAAAAAdAAAAABAD
#notoabortionKE https://twitter.com/hashtag/NoToAbortionKE?src=hashtag_click 09/12/2021 https://archive.twitter-trending.com/kenya/12-09-2021
#citizengoatthesenate https://twitter.com/hashtag/CitizenGOAtTheSenate?src=hashtag_click 09/07/2020 https://archive.twitter-trending.com/kenya/07-09-2020
#STOPabortionUNCSW https://twitter.com/search?q=%23stopabortionUNCSW&src=typed_query&f=live 03/23/2021 https://drive.google.com/file/d/1IXbEMdbaSkGmg8rbjlnbiqxVOKBjkZek/view?usp=sharing
#KihikaAbortionBillSuspended https://twitter.com/hashtag/KihikaAbortionBillSuspended?src=hashtag_click 06/24/2020 https://archive.twitter-trending.com/kenya/24-07-2020



Nuestra investigación apunta a que el objetivo de las campañas en particular podría haber sido frustrar cualquier intento de conversar sobre las leyes propuestas con base en hechos y crear pánico moral respecto a la problemática que abordan. Se trata de una táctica que probablemente logrará su objetivo porque la sexualidad de los adolescentes, el aborto y los vientres de alquiler son cuestiones muy polémicas en Kenia. Cualquier llamado a un diálogo sincero basado en hechos se enfrenta a información errónea y argumentos moralistas estridentes.

Las campañas en Twitter parecen haber promovido de manera no auténtica el sentimiento antielección y los ataques contra mujeres políticas y activistas en favor de los derechos de género. Estos ataques contra activistas casi siempre se hicieron mediante caricaturas y memes que repetían los mensajes de los grupos de derechas estadounidenses y europeos. Por ejemplo, algunos de los tuits impulsaron las teorías de la conspiración de George Soros a las audiencias. A Soros se le suele ver como el coco de la extrema derecha y algunas de las campañas promovían la idea de que estaba financiando ataques contra Ann Kioko. Esta narrativa en particular también fue evidente en algunas de las instrucciones que recibieron los influenciadores en sus grupos de WhatsApp.

Screen Shot 2022-02-18 at 1.33.07 PM

Contenido contra los legisladores


Como en las campañas no auténticas anteriores, pudimos identificar nuevamente esos patrones que vuelven los temas en tendencia de Twitter tan fáciles de manipular, en otras palabras,

Señales delatoras de las campañas no auténticas

Una repetición evidente del contenido dentro de las etiquetas. Las etiquetas y frases formaban parte del paquete mediático que se proporcionaba a los influenciadores desinformadores mediante instrucciones en sus grupos de WhatsApp. En los tuits de las cuentas que se utilizaban para la campaña se usaba el mismo conjunto de activos mediáticos o se repetían las mismas frases. Según los influenciadores con quienes hablamos, esto también ocurría cuando una persona operaba varias cuentas para impulsar la campaña.

Tweets containing images depicting Kenyan Legislators

Tuits que caricaturizan a los legisladores kenianos

Tweets containing 'stop surrogacy now' campaign material

Tuits que incluyen material de la campaña "¡detengamos ya la maternidad subrogada!


Varias de las cuentas que parecen haber participado en estas campañas no
tuiteaban más que etiquetas políticas y promocionales por días y días. Conforme a los influenciadores con quienes hablamos, esto se debía a que dichas cuentas construyen audiencias con el fin de utilizarlas para vender servicios de mercadotecnia a quien lo solicite.

Además, las etiquetas se divulgaban sincronizadamente. Algunas incluían la mayor cantidad de contenido durante el horario matutino, una táctica que coincide con el comportamiento no auténtico observado en investigaciones previas ya publicadas.

Graphs showing synchronized publishing of tweets for various hashtags

Gráficas que muestran la publicación sincronizada de etiquetas


En muchos casos, los tuits con estas etiquetas compartieron información falsa sobre salud reproductiva y las leyes al respecto, en lo que parece ser un intento de engañar a los ciudanos, quienes, según los funcionarios de salud, muchas veces carecen de información sobre dichos temas. En esos tuits, la Ley de Salud Reproductiva se calificó como una ley del aborto, a pesar de que varios investigadores y observadores de derechos humanos señalaron que la ley armonizaba con lo dispuesto en la Constitución vigente. Además, la campaña #stopsurrogacybillKE, lanzada el 19 de noviembre de 2020 (y publicada en la sección Tendencias de Twitter), incluía varios ejemplos de información errónea sobre salud y declaraciones falsas. Los tuits con la etiqueta #stopsurrogacybillKE hacían afirmaciones en falso como:

Distintos expertos en medicina y salud pública del Centro de Investigación sobre Salud y Población en África (APHRC) revisaron esas afirmaciones y nos confirmaron que todas son falsas. Kenneth Juma, investigador en el APHRC, afirmó: “Estos señalamientos, sobre todo los relacionados con la Ley de Maternidad Subrogada de 2019, son FALSOS y carecen de sustento científico. La mayoría son declaraciones engañosas que aprovechan el desconocimiento de la gente". Y agregó: "Ya en profundidad, la evidencia reunida en investigaciones científicas publicadas ha descartado tales afirmaciones. Por ejemplo, aunque los nacimientos por fertilización in vitro podrían implicar ciertos riesgos, los investigadores que analizaron sistemáticamente los resultados de distintos estudios no encontraron evidencia de más problemas conductuales o cognitivos en los niños concebidos mediante este método. Y cuando ocurren afecciones del desarrollo neuronal, su causa podría ser el bajo peso al nacer o una multiplicidad de fetos".


Estamos investigando la información que nos hizo llegar la Fundación Mozilla y hemos suspendido permanentemente más de 240 cuentas conforme a nuestra política relativa al spam y la manipulación de la plataforma.

Un vocero de Twitter



¿Cómo queda Twitter con esto?


El caso de CitizenGO muestra el tipo de vulnerabilidades que plataformas como Twitter causan en Kenia. Twitter ha señalado varias veces que desea que su plataforma sea un lugar donde puedan darse conversaciones sanas. Pero el problema con este tipo de campañas de desinformación es que despojan a tales conversaciones de los hechos y crean pánico moral, con lo que obstaculizan cualquier posible avance para legislar los derechos de salud reproductiva. De acuerdo con el investigador Kenneth Juma, las campañas de desinformación se valen del desconocimiento del público sobre estos temas y los intentos por legislarlos: "El poco conocimiento sobre los derechos y salud sexual y reproductiva suele ser el caldo de cultivo para esa información errónea. Casi siempre, los causantes de tales distorsiones no quieren brindar información creíble, sino rodear el tema de sensacionalismo e imposibilitar las conversaciones apropiadas".

Como muchas kenianas recurren a las redes sociales en busca de información sobre salud reproductiva, resulta crítico que las plataformas mejoren la manera como detectan y manejan la desinformación sobre salud. La rapidez y la manera como se dieron estas campañas, así como el momento crítico en el que ocurrieron, sugiere que algunos de los mensajes sobre salud reproductiva que se ven en Twitter son producto de una campaña de manipulación. Como explica Peter Tatchel: "La extrema derecha se vale de las plataformas para esquivar las consecuencias de promover el miedo y el odio mediante afirmaciones ponzoñosas que luego sustentan cacerías de brujas y leyes represivas. Obtienen más por su dinero si pueden sacarle la vuelta a la prensa local para llegar a la gente".

Estos grupos dejaron en claro que buscan meter mano en las campañas electorales y consideran Twitter como una herramienta vital para alcanzar sus objetivos. Como ya dijimos, muchos grupos de derechas, como CitizenGO, reconocen la influencia de Kenia en la región y, por ende, les interesa incidir en las elecciones en el país.

Screen Shot 2022-02-18 at 1.36.45 PM

Imagen de la campaña de voto contra una legisladora


Una vez más, nuestra investigación deja ver que el algoritmo de tendencias de Twitter simplemente es muy manipulable. A pesar de la evidencia abrumadora que le hemos proporcionado sobre cómo se abusa de su funcionalidad Tendencias, Twitter apenas hace poco hizo públicas las medidas que tomará en Kenia. Esto resulta particularmente inquietante porque las elecciones generales de 2022 pronto se llevarán a cabo y porque anticipamos un incremento en la demanda de los servicios de desinformación pagados.

Esto dijo un vocero de Twitter respecto a nuestros hallazgos:

“Estamos investigando la información que nos compartió la Fundación Mozilla y hemos suspendido permanentemente más de 240 cuentas con base en nuestra política relativa al spam y la manipulación de la plataforma. Nuestro combate a la viralidad no auténtica y las cuentas falsas de influenciadores es una actividad de largo plazo. Desde 2020, hemos suspendido permanentemente más de 600 000 cuentas que se determinó que violaban nuestras reglas en este sentido.

“La naturaleza singularmente abierta de Twitter posibilita investigaciones como esta y, por nuesta parte, seguimos vigilando cualquier actividad coordinada usando nuestro servicio. Gracias a las revisiones mediante tecnologías y humanos, combatimos proactiva y rutinariamente los intentos de manipular la plataforma y los mitigamos a gran escala al actuar contra millones de cuentas cada semana por violar nuestras políticas al respecto. Continuamente mejoramos la tecnología de detección automática de Twitter para encontrar cuentas que infrinjan las reglas tan pronto como aparecen en el servicio".

Twitter no respondió a las preguntas respecto a sus posibles alianzas con organizaciones de la sociedad civil e instituciones de salud pública en Kenia, ni tampoco dijo si su actual política sobre salud publica está equipada para manejar tales problemas.

También intentamos comunicarnos con CitizenGO varias veces para darles la oportunidad de responder a nuestros hallazgos, pero no respondieron al momento de publicar este informe.

En este sentido, cabe destacar que si algo aprendimos de la pandemia de COVID-19 es que Internet está plagado de información errónea sobre salud. Por ser la salud un tema político, este problema a veces se origina de la propia comunidad de médicos y le complica enormemente la función de arbitraje a las plataformas de redes sociales, que tampoco suelen contar con expertos en salud para enfrentar la información errónea sobre el tema. Al respecto, Twitter actúa valiéndose de una serie de políticas a las que a veces solo se recurre cuando existe atención o presión del público. Pero Twitter podría hacer más. El investigador Kenneth Juma del APHRC solicitó a las plataformas como Twitter no solo irse por las soluciones más fáciles y explicó que, "además de ponerle una marca a la información falsa, estas plataformas podrían eliminarla directamente y bloquear a quienes la estén superdifundiendo".

Es necesario que haya Twitter en Kenia y a todos interesa que la plataforma se convierta en un vehículo de discursos más sanos. Es un medio vital de la interacción cívica y la educación, y puede utilizarse para pedir cuentas a los funcionarios públicos. Por ende, recomendamos que Twitter tome medidas concretas para impedir que su funcionalidad de tendencias sea manipulada y que, para proteger su plataforma de la información errónea, tome las siguientes medidas:

  1. realizar análisis de riesgos específicos de cada país para identificar, evaluar y mitigar las maneras como el algoritmo de tendencias puede contribuir a la desinformación en línea;
  2. proporcionar más claridad e información sobre sus esfuerzos por arreglar el algoritmo de tendencias, pues en ciertos territoriosno basta con que solo avise que eliminó dicha funcionalidad;
  3. forjar alianzas con verificadores de datos y organismos de la sociedad civil para ayudarles a manejar las complejidades de la región, y ser transparente con el público respecto a tales alianzas; y
  4. establecer colaboraciones especializadas con investigadores intrarregionales con el fin de controlar y conocer mejor las maneras como Twitter puede ser un vehículo para la desinformación.

Conclusión

En vista de nuestros hallazgos y de la inminencia de las elecciones de 2022 en Kenia, nos preocupa que las políticas de Twitter sobre manipulación de la plataforma e incluso su aplicación no hayan bastado para hacer algo respecto a la manera como ocurre la influencia política en la plataforma. A pesar de que compartimos con Twitter la evidencia y que Twitter suspendió las cuentas, justo antes de que publicáramos este reportaje se dio otra campaña más en la que se utilizaron las mismas tácticas reportadas. Y todo esto ocurrió a pesar de las políticas vigentes de Twitter y, sobre todo, a pesar de su aplicación. Pedimos a la plataforma que tome en cuenta nuestras recomendaciones para protegerse de cualquier posible daño, sobre todo por la importancia de Twitter para el discurso político en Kenia.


Notas al pie

  1. [1]

    Esta investigación mantiene como anónima la identidad de ciertas fuentes, con el fin de salvaguardar su privacidad y seguridad. La información proporcionada por fuentes anónimas se verificó mediante conversaciones telefónicas, imágenes de pantalla y corroboración con otras fuentes y/o actividad pública en Twitter.